Emails Transaccionales al descubierto: Tipos y Características

Seguro que a ti también te han llegado esos mails en los que te recuerdan que dejaste tu carrito lleno, en el que te avisan de que tu artículo favorito está a punto de agotarse u ofreciéndote productos que van genial con lo que acabas de comprar. Entonces sabes más de los emails transaccionales de lo que piensas.

Cualquier negocio que se precie debe contemplar los emails transaccionales para convertir a sus usuarios en clientes. Por eso, vamos a contarte en este post en qué consisten este tipo de envíos y cómo puedes crear los tuyos.

Qué es un email transaccional

Como ya te hemos adelantado antes, un mail transaccional es este tipo de correo electrónico que se envía al usuario dándole información relacionada con su actividad como usuario dentro de una web.

Por norma general, este tipo de envíos suelen desencadenarse por una acción que ha realizado el usuario previamente y forman parte de una automatización de emails. Por ejemplo, si hemos navegado por un ecommerce y hemos añadido algo al carrito, pero no hemos finalizado la compra, es posible que recibamos un email con un asunto como: “¿No olvidas algo?”, “Termina lo que empezaste”.

Aunque este sea el tipo más común de email transaccional, existen otras muchas opciones como los correos de confirmación de compra. Donde se aprovecha para ofertar otros productos o servicios.

Que podemos conseguir con los emails transaccionales

Aunque el objetivo principal de los emails transaccionales sea conseguir que el usuario convierta, existen otras razones por los que son clave en una estrategia de email marketing exitosa.

• Comunicarse con el usuario sin tener que invertir demasiados recursos. Los envíos transaccionales se suelen activar cuando el usuario realiza alguna acción sobre nuestra web y dependiendo de cuál sea esa acción se desencadena un mensaje u otra. Esto permite que se envíen mensajes personalizados, el mensaje correcto en el momento oportuno, lo que aumenta las posibilidades de que se produzca una conversión.
• Mejorar la imagen de la marca con mensajes personalizados. Los emails transaccionales transmiten transparencia y honestidad sobre la marca. Además, pueden ser una gran oportunidad para consolidar la imagen de marca con el diseño de los envíos.
• Mejora la experiencia del cliente. Una de las funciones principales de los emails transaccionales es aportar información importante a los usuarios sobre el estado de sus pedidos. Estos mensajes hacen que los clientes se sientan seguros e informados. Lo que ayuda a fidelizar a los clientes.
• Aumentar la interacción y el engagement. En los emails transaccionales se suele incluir contenido relevante con el que el usuario puede interactuar, como: encuestas de satisfacción o servicio de atención al cliente.

En definitiva, los emails transaccionales aportan grandes beneficios no solo a la hora de convertir usuarios en clientes, sino también en cuanto a reforzar la imagen de marca.

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Tipos de emails transaccionales que puedes crear

Podemos hablar de diferentes tipos de emails transaccionales según el tipo de acción que active su envío:

Abandono del carrito

Son los emails transaccionales más comunes y es que hay un alto porcentaje de usuarios que dejan carritos llenos sin completar la transacción. Cuando esto se produce se inicia una automatización en la que se envía un email al usuario recordándole que ha dejado algo pendiente y animándole a terminar la transacción.

Estos tipos de envíos son indispensables, ya que hablamos de usuarios en los que la decisión de compra estaba muy avanzada.

El objetivo de estos emails transaccionales es conseguir reorientar al usuario para que acabe comprando. Algunos de los recursos que te pueden ser de gran ayuda en este caso es:

• Generar urgencia. “Últimas unidades”, “A punto de agotarse”, “Subida de precio” etc.
• Ofrecer un código de descuento.
• Gastos de envío gratuitos.
• Añadir testimonios o comentarios de otros clientes.

Lo más importante es que sea un mensaje personalizado para que el usuario se sienta valorado. Que apelemos a su nombre y a los productos que ha añadido.

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Confirmación de pedido

Junto con el tipo de emails transaccionales anteriores son los más populares y no es casualidad, ya que el potencial que tienen es muy relevante.

Cuando un usuario realiza un pedido es necesario mandar un mail de confirmación, por dos motivos principales. Por un lado, le damos esa confianza al cliente de que su pedido se ha tramitado correctamente y que lo estamos preparando. Estos mensajes también tienen que ser lo más personalizados posible para que el cliente pueda comprobar que toda la información de su pedido está correcta y le transmitamos tranquilidad.

Además, por otro lado, es la oportunidad de ofrecerles otros productos o servicios para hacer que vuelva a comprar.

Notificaciones de cuenta

Este tipo de mails se suelen mandar cuando se realizan cambios importantes en la cuenta de un usuario. Por ejemplo, un cambio de contraseña. Este tipo de mensajes transmiten confianza al usuario al saber que le contactamos cuando se producen cambios significativos que afecten a su cuenta.

Bienvenida a la suscripción

Otro de los tipos de email transaccionales más utilizado se produce en el mensaje de bienvenida al suscriptor. Si te has dado de alta como usuario en algún ecommerce seguro que habrás recibido un mail dándote la bienvenida e informándote de las ventajas que vas a poder disfrutar ahora que eres suscriptor.

El mensaje de bienvenida también puede ser un momento ideal para impactar con productos y servicios. Incluso con un descuento de bienvenida.

Recuperación de suscriptores

Una técnica que funciona muy bien para mantener activos tus usuarios son los mensajes de recaptación. Cuando detectamos que un usuario lleva tiempo sin interactuar con nuestros envíos, es el momento de mandarle un email para preguntarle si sigue ahí y si quiere formar parte de nuestra lista de suscripción.

Petición de feedback

Conocer la opinión de tus clientes siempre es algo positivo que nos ayuda a mejorar y a saber qué imagen estamos dando al público. Es por eso que muchas marcas realizan envíos en los que piden a sus clientes que rellenen una encuesta de satisfacción o puntúen de alguna forma los servicios prestados.

En estos mensajes el objetivo principal es conseguir fidelizar a los clientes y fomentar la interacción con la marca.

Mensajes de fidelización

La fidelización de los clientes es uno de los objetivos más importantes en cualquier estrategia de marketing. Por eso no es de extrañar que uno de los tipos de emails transaccionales vayan dirigidos específicamente a ganarnos un huequito en el corazón de los clientes, haciendo que se sientan especiales. Por ejemplo, el día de su cumpleaños.

Aunque estos son algunos ejemplos de tipos de emails transaccionales que existen, podríamos sacar un tipo por cada acción que hace el usuario en una web. Otros ejemplos de emails transaccionales también podrían ser: confirmación de pago, restauración de contraseña, cambio de método de pago, etc.

Consejos para crear emails transaccionales que funcionen

Ahora que ya conoces en qué consiste un email transaccional y los tipos que existen actualmente, podemos pasar a explicar cómo deben ser este tipo de envíos para que consigan su principal objetivo: convertir.

Personaliza tus mensajes

Si quieres conseguir conectar con tus clientes potenciales, es importante que consigas que se sientan únicos y especiales. Por eso es fundamental que personalices el mensaje. Ya sea bien con el nombre, con los últimos productos que haya visitado u otros recursos que hagan pensar al usuario que nos importa.

Mensajes directos

Una de las principales normas del email marketing en general, es ser directo. No andarnos con rodeos. Ir al grano de lo que queremos contar. Tanto en el asunto del email como en el cuerpo del email. Que el usuario entienda el mensaje en poco segundos y que los botones CTAs hacia donde queramos dirigir al usuario también sean claros que no den lugar a confusión al usuario de hacia dónde le vamos a llevar.

Tono cercano y de agradecimiento

Recuerda que los emails transaccionales se generan porque los usuarios han realizado una acción en nuestra web. Esto quiere decir que han interactuado con la marca, por lo que debemos mostrarnos a ellos con un discurso cercano y agradecido. Por ejemplo, dando las gracias por suscribirse o por realizar un pedido.

Estimula el cross-selling

Partiendo de la base de que los emails transaccionales se mandan a usuarios que muestran interés por nosotros, no podemos perder la oportunidad de mostrarles productos o servicios relacionados para estimular la venta cruzada. Son usuarios que están todavía “calientes”, es decir, se encuentran en un punto alto del funnel de ventas, por lo que es el mejor momento para impactarles.

Si quieres conocer más sobre el funnel de ventas, te recomendamos que eches un vistazo a nuestro post, análisis de funnel: maximizando el rendimiento de tu embudo de ventas.

Diseño responsive

Asegúrate de que el diseño de tus emails es cómodo para la lectura, no abruma demasiado, pero llama la atención. Sobre todo, que sea legible tanto en desktop como en móvil.

Diferencia entre un mail transaccional y un mail promocional

Los emails transaccionales suelen confundirse con los emails promocionales, pero son muy diferentes tanto en la teoría como en la práctica. ¡Te lo contamos!

Primero que todo, como ya sabes, los emails transaccionales son correos que nacen a raíz de una automatización. Su objetivo es mejorar la experiencia del usuario dándole información relevante sobre sus acciones.

Por su parte, los emails promocionales tienen como objetivo informar al usuario sobre promociones, descuentos especiales, últimas unidades, nuevas colecciones, etc.

Relacionado con la primera diferencia, otro actor diferencial entre los emails transaccionales y los promocionales es el destinatario. Los emails promocionales suelen tener un envío masivo, es decir, se envían a todos los contactos de una lista. Sin embargo, los emails transaccionales son individuales para un destinatario, ya que dependen de sus acciones.

Otra diferencia importante es que los emails promocionales solo se pueden enviar a los contactos que formen parte de nuestra lista de suscripción y que hayan aceptado recibir mensajes con fines comerciales. Sin embargo, los emails transaccionales pueden enviarse a cualquier contacto.

Por ejemplo, un cliente hace un pedido y le mandamos un mail de confirmación, pero no podemos mandarle un email con las nuevas promociones si no se ha suscrito o ha aceptado el consentimiento RGPD.

Por otro lado, tanto en los mails transaccionales como promocionales, es muy relevante conocer los principales KPIs de email marketing, tales como la tasa de apertura, CTR…

Normativa de privacidad en los emails transaccionales

Los envíos de emails transaccionales se consideran necesarios para informar al usuario de una acción relevante sobre la actividad de su cuenta, por lo que no es necesario que se solicite el consentimiento del RGPD.

Sin embargo, muchas veces la línea entre contenido transaccional y promocional es bastante difusa, por lo que es mejor que nos aseguremos de tener los permisos pertinentes y poder impactarlos en otra ocasión con informaciones promocionales sin riesgo de incumplir la normativa.

Los emails transaccionales son grandes herramientas del marketing que nos ayudan a conseguir grandes beneficios sin invertir muchos recursos, por lo que es un canal que no podemos desaprovechar. ¿Preparado para iniciarte en el mundo del email marketing? Si crees que necesitas un empujoncito más podemos ayudarte.

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